Este lunes y martes, el equipo motor del programa Laguntza de nuestro centro —formado por Jon Urtats, Basilio, Nerea Ruiz y Eva Pérez, directora del colegio— dinamizó con el claustro una serie de dinámicas vivenciales basadas en la Ecología Emocional y los Círculos Restaurativos.
Durante las sesiones, el profesorado pudo experimentar de forma lúdica y significativa herramientas como el tarro de las vitaminas emocionales y un círculo restaurativo, entre otras propuestas. Las dinámicas generaron un ambiente de cohesión, cercanía y liberación de tensiones, favoreciendo no solo el bienestar del equipo docente, sino también dotándolo de recursos concretos para aplicar en el aula con el alumnado.
Las jornadas concluyeron con un vermut terapéutico cargado de conversaciones sinceras, risas compartidas y sentido de pertenencia.
Desde nuestro centro apostamos firmemente por este tipo de iniciativas como parte fundamental en la prevención del acoso escolar y la implementación de una cultura del buen trato. Creemos que el acompañamiento socioemocional y la escucha activa son claves en la educación integral de nuestro alumnado.

Cuidarnos para cuidar. Sentir para educar.