El día 12 de febrero viajamos hasta la Cañada real, cerca del pueblo de Larraya, para colaborar en la plantación de árboles. Estos árboles servirán para proteger ese antiguo camino que se empleaba para llevar los rebaños de ovejas desde la montaña de Navarra, en el Pirineo, hasta la Ribera de Navarra.
Esos árboles se necesitan para proteger ese camino. Así los agricultores lo verán mejor y lo respetarán.
También son muy importantes porque con ellos favorecemos a la fauna salvaje, a los animales que viven cerca. Las especies que plantamos son árboles que darán frutos en otoño e invierno para que pájaros, corzos, erizos y otros animales se puedan alimentar de ellos en épocas de escasez de alimento.
Además, visitamos la Granja de EsquÍroz y ayudamos a plantar flores en macetas para que los vecinos de esos pequeños pueblos, que están alrededor de Pamplona, puedan tener más bonitas las calles de sus pueblos. De paso saludamos a algunos de los habitantes de la granja.